El 2 de noviembre, México se tiñe de cempasúchil, velas y recuerdos para honrar a quienes nos dejaron, pero siguen vivos en cada historia que compartimos. El Día de Muertos es una de las tradiciones más significativas y coloridas del país, un momento que reúne a familias y amigos para recordar con alegría, celebrar la vida y agradecer. Y en el corazón de estas reuniones, un buen tequila no solo acompaña, sino que enaltece la esencia del momento. Entre ellos, Tequila Don Ramón se distingue por su autenticidad, su elegancia y su arraigo a las raíces mexicanas.
Desde el cultivo del agave azul Tequilana Weber hasta la destilación en alambiques de cobre y el cuidado artesanal de cada detalle, Tequila Don Ramón representa la herencia tequilera con estándares de calidad reconocidos a nivel internacional. Su innovador método de extracción en crudo, que permite obtener un tequila puro usando menos agave sin sacrificar sabor, combinado con la cocción en hornos de mampostería, da como resultado un destilado limpio, suave y lleno de matices.
Además, los tequilas de la casa han recibido Doble Medalla de Oro en el San Francisco World Spirits Competition, uno de los certámenes más respetados del mundo, reafirmando su posición como un tequila de excelencia para los momentos más importantes.
El Tequila Don Ramón Blanco es ideal para quienes prefieren el sabor vibrante y puro del agave. Perfecto para tragos ligeros o cocteles de bienvenida mientras se monta el altar y se comparten anécdotas.
Con notas suaves de vainilla, caramelo y madera, el Tequila Don Ramón Reposado es perfecto para acompañar platillos como pozole, enchiladas o tamales que suelen servirse en estas fechas. Su carácter equilibrado invita a conversaciones largas y momentos íntimos.
Para brindar por la memoria y saborear sin prisa, el Tequila Don Ramón Añejo y el Extra Añejo son opciones insuperables. Su maduración prolongada ofrece matices de cacao, nuez y agave cocido que armonizan con postres como pan de muerto o chocolates artesanales.
Los Cristalinos Don Ramón, reposados y añejos filtrados gota a gota, destacan por su claridad y elegancia. Son el equilibrio perfecto entre complejidad y suavidad, ideales para un brindis solemne o un coctel ligero durante la tarde.
Agregar una botella de Tequila Don Ramón Cristalino o Añejo al altar es un tributo elegante para quienes disfrutaban de un buen tequila. La presencia de una botella bien diseñada y con detalles como cristales Swarovski® honra la memoria y aporta distinción.
Reúne a la familia alrededor del altar, comparte recuerdos y levanta tu copa con tequila premium. Servirlo en copas tequileras permite apreciar sus aromas y complejidad.
El Día de Muertos es un momento para honrar la memoria y celebrar la vida. Con Tequila Don Ramón, cada sorbo es un homenaje a quienes amamos y a nuestras raíces mexicanas. Sea que elijas un Blanco para cocteles frescos, un Reposado para compartir en familia, o un Cristalino para brindar con distinción, encontrarás el tequila perfecto para esta fecha.
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En Casa Don Ramón, el tequila es nuestra pasión, nuestro orgullo, nuestra tradición.